Paula, fue un terremoto de expresiones y felicidad, contactaron con migo para hacer su bautizo y le brindamos hacer una sesión en su casa para los recordatorios que entregarían a su familia ese día. En cuanto llegamos a su casa Paula no paro de jugar, de sonreír de buscarme por todos lo sitios de enseñarme todos sus juguetes, en fin de ser Paula.
Muchas gracias a sus papas por dejarme entrar en sus vidas y dejarme hacer su bautizo y esta sesión tan bonita en su casa.
Un abrazo
Manuel Castaño
www.manuelcastano.es